Método Willems para la educación musical temprana

Método Willems para la educación musical temprana

El método Willems es uno de los más destacados en la educación musical, especialmente para la educación infantil. Aquí te presento un resumen detallado sobre este método:

Edgar Willems (1890-1978) fue un discípulo de Dalcroze y creador de una metodología que se basa en el estudio de la psicología como fundamento de su trabajo educativo musical. A diferencia de otros métodos, Willems no relaciona la música con medios no musicales (como colores o fonomimia), ya que considera que estos elementos extramusicales pueden ser contraproducentes y distraer la atención del niño.

Aspectos clave del método Willems:

1. Educación auditiva: Willems considera que la educación del oído musical es imprescindible para la formación musical y personal. Clasifica la audición en tres tipos:

• Sensorial (reacción)
• Afectiva (melodía)
• Mental (armonía)

2. Desarrollo sensorial: Enfatiza la necesidad de una educación muy sensorial, ya que la práctica musical requiere simultáneamente de la audición, la vista y el tacto.

3. Importancia de la música viva: Otorga gran relevancia a la integración de la música viva en la escuela y a toda práctica musical, vocal o instrumental.

4. Enfoque en edades tempranas: Es especialmente relevante en la Educación Infantil, centrándose en la educación musical de niños a partir de los tres años.

5. Discriminación de parámetros del sonido: Utiliza la duración e intensidad del sonido para el dominio rítmico, el timbre para reconocer la naturaleza de los objetos, y la altura de los sonidos para el dominio melódico.

6. Materiales y recursos: Además de los instrumentos escolares tradicionales, Willems crea juguetes y otros instrumentos específicos para trabajar la audición, como flautas de émbolo, tubos sonoros, palillos, sirenas, carillón microtonal, martillos sonoros y campanillas.

7. Ausencia de elementos extramusicales: Willems evita relacionar la música con colores, fonomimia u otros elementos no musicales, considerando que estos pueden dispersar la atención del niño y suponer una pérdida de tiempo para el educador.

El método Willems se destaca por su enfoque en el desarrollo auditivo y la importancia que da a la educación musical temprana, sentando así bases sólidas para el aprendizaje musical futuro.

10 Actividades Musicales con el Método Willems:

1. Juego de sonidos cotidianos: Pide a los niños que identifiquen y reproduzcan sonidos cotidianos (como el tic-tac de un reloj o el sonido del agua) utilizando instrumentos como campanillas o tubos sonoros.

2. Caminata rítmica: Camina por el aula marcando un ritmo con pasos. Los niños deben imitar el ritmo utilizando palillos o sus manos.

3. Reconocimiento de timbres: Presenta varios instrumentos musicales y juega a identificar el timbre de cada uno con los ojos vendados.

4. Caza de sonidos: Lleva a los niños al exterior y pídele que identifiquen y reproduzcan los sonidos que escuchan en la naturaleza usando instrumentos de percusión.

5. Melodías con flautas de émbolo: Utiliza flautas de émbolo para crear y repetir sencillas melodías, desarrollando así el sentido melódico de los niños.

6. Juego de eco: Toca una secuencia de notas en un carillón y pide a los niños que la repitan exactamente como la escucharon, fomentando la memoria auditiva.

7. Percusión corporal: Realiza patrones rítmicos utilizando partes del cuerpo (palmas, piernas, pecho) e invita a los niños a imitarlos.

8. Sesión de improvisación: Proporciona a los niños instrumentos simples y anímalos a improvisar melodías y ritmos, explorando libremente su creatividad musical.

9. Cuento sonoro: Cuenta una historia y acompáñala con efectos de sonido realizados con instrumentos musicales, implicando a los niños en la creación de estos sonidos.

10. Juego de alturas: Usa campanillas de diferentes alturas (frecuencias) y realiza un juego donde los niños deben ordenar los sonidos de más grave a más agudo o viceversa.

Estas actividades no solo promueven el desarrollo auditivo y sensorial, sino que también fomentan la creatividad y el amor por la música desde edades tempranas, en línea con los principios del método Willems.